Ante la entrada de la nueva temporada, y después de todas las tensiones sufridas por los precios por efecto de la bajada del consumo y de las ventas, no está de más repasar ciertos aspectos que influyen en la rentabilidad de los negocios y que repercuten en que por más ventas que se hagan, quizás los resultados económicos no sean los esperados. La rentabilidad no es más que el resultado del proceso productivo, y en éste tiene un papel fundamental la política de ventas y marketing. La principal conclusión es que, en el contexto actual hay que orientar todos los procesos hacia el cliente para lograr resultados satisfactorios.
A lo largo de este año se ha seguido dando una clara tendencia a rebajar precios para lograr una competitividad ficticia y poder sortear con mayor soltura una situación de crisis que se está haciendo ciertamente más larga de lo imaginado en un principio. Ante la bajada del consumo industrial y particular, las áreas comerciales ofrecen descuentos creando una guerra de precios encubierta que conduce a muchas empresas a no lograr resultados positivos aunque se cumplan los objetivos de ventas. Para salir de esta situación, es importante realizar un análisis de ventas que determine si los resultados económicos respecto a las ventas realizadas logra también el objetivo marcado al inicio de la temporada. Además, aspectos como la calidad o un estudio profundo del sector o el segmento en el que se trabaja puede mejorar sustancialmente la rentabilidad. (Artículo completo)
No hay comentarios:
Publicar un comentario